La alcaldía de Río de Janeiro inauguró este miércoles la Arena de la Juventud y el estadio de Deodoro, dos de las instalaciones para los Juegos Olímpicos, y admitió que ahora le preocupa cumplir los plazos para entregar el velódromo.

Tanto la Arena de la Juventud, como el estadio de Deodoro, forman parte del Complejo Deportivo de Deodoro.

Estas instalaciones, situadas en el oeste de Río de Janeiro eran motivo de preocupación de la alcaldía y el Comité Olímpico Internacional (COI) debido a que las obras fueron adjudicadas con varios meses de atraso y comenzaron en 2014.

Las dos nuevas instalaciones se suman a otras cuatro ya inauguradas y probadas: la pista de ciclo montañismo, la de BMX, el circuito de piragüismo en aguas bravas y el centro de hockey.

El Parque de Deodoro, en el que se disputarán once modalidades, ha quedado prácticamente concluido a cinco meses de los Juegos.

"El que era nuestro mayor drama hoy es un hecho. Muchos dijeron que las instalaciones de Deodoro no serían entregadas a tiempo para los Olímpicos. Felizmente estamos con todo listo en este complejo", dijo el alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes.

Garantizó que el velódromo será inaugurado a tiempo para un evento de prueba que está previsto en abril próximo.

La preocupación obedece a que la empresa responsable, que ya había atrasado las obras, afronta una crisis financiera y anunció esta semana que contratará otra para seguir con los trabajos.

"Hacía algún tiempo teníamos dificultadas con esta empresa pero ella decidió hacer una subcontratación para colocar una empresa mayor, con mayor capacidad y más empleados, por lo que vamos a conseguir cumplir los plazos previstos", dijo el alcalde.

El estadio de Deodoro será puesto a prueba el próximo fin de semana, cuando albergará un torneo internacional de rugby siete que reunirá 96 jugadores de ocho países.

La Arena de la Juventud abrirá sus puertas oficialmente el 10 de marzo, cuando comienza la Copa del Mundo de pentatlón moderno.

El estadio de Deodoro será desmontado una vez concluyan los Olímpicos, ya que el rugby no es un deporte de alta demanda en Brasil, la Arena de la Juventud será uno de los legados de los Juegos y, bajo la administración del Ejército, servirá como gimnasio, con capacidad para 2.000 personas, para entrenamientos de equipos de alto rendimiento y para diferentes competiciones.

"Hicimos un estudio y constatamos que esta región es una de las más jóvenes y pobres de la ciudad. Entonces nada más justo que miráramos también a Deodoro y la beneficiáramos con el legado olímpico", aseguró el secretario nacional de Deportes de Alto Rendimiento de Brasil, Ricardo Layser.

El director del COI para Río 2016, Gilbert Felli, coincidió. "Siempre dijimos que Deodoro sería un gran legado social para Río de Janeiro y ahora vemos que es una realidad", dijo.

EFE